Cáncer y su acontecida energía eclipsada.

¡Cáncer!

Qué acontecida ha estado, este último tiempo, la energía de Cáncer, eclipses solares y lunares, luna llena, es decir, ¡¡¡Intensidad!!! Energías que nos llaman a la introspección, a promover la auto comunicación, el auto cuidado. Cáncer nos invita a generar un contacto profundo con nuestro mundo emocional, ese mundo que a veces nos genera incomodidad, miedo, tristeza, pena y dolor.

Y es que Cáncer es de verdad miedoso, tiene ideas fantásticas pero duda de si mismo y de sus capacidades, eso lo desmotiva, lo confunde y lo esconde, la fuerza de los eclipses genera una alquimia interior que no solo les afecta a los Sol Cáncer sino a todo su entorno, a todos nosotros.

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Cáncer imprime en este período una energía de contacto, contacto del consciente con el inconsciente, contacto de las emociones con las palabras. He visto estas últimas semanas en las terapias junto a mis pacientes como Cáncer ha conducido la temática de las sesiones, orientándolas al trabajo del Cuarto Chakra con nuestro Niño Interior, nos ayuda con su familiaridad emocional, con su infantilismo amoroso a generar intimidad con esa entidad tan poco conocida por algunos como lo es el Niño Interior. Y es que si ese niño está dañado y no es escuchado, nos transforma en adultos que hacen literalmente "pataletas" esta es la razón por la cual la atmósfera actual nos invita al auto conocimiento, preparándonos el terreno para trabajar nuestra autoestima, fortalecer nuestras virtudes y ser quienes realmente somos. Por eso no es curioso que en estas fechas te hayan dado ganas de comenzar una terapia, de aprender una nueva forma de auto sanación con gemas por ejemplo, de leerte las cartas del Tarot, algún oráculo o cualquier técnica o disciplina que te permita sanar esas heriditas de infancia que hoy resuenan en tu adultez.

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Es Cáncer quien nos ayuda con su amor y sensibilidad a trabajar en nuestro sentir, nos guía para internarnos en el corazón y contactar con el niño interior que quiere generar una comunicación fluida y sentirse querido y apreciado por este adulto ocupado en sus labores. Gracias a Cáncer hemos podido hacer ese "Contacto" potenciado con el eclipse de Sol, donde hay contacto entre el Sol y la Luna, hay contacto de la emoción con la mente, hay contacto de nuestro adulto con nuestro niño, hay contacto con nuestro amor propio, hay contacto con nuestra felicidad. El eclipse de Luna nos invita a trabajar nuestra sombra, así como la tierra dibuja su sombra sobre la luna, tenemos que hacernos cargo de nuestra oscuridad del pasado y vivir un presente alegre y dichoso. La Luna llena en Capricornio nos brinda su sensación de seguridad, de logro, nos ayuda a concretar y a ejecutar, esta energía ha sido clave para quienes venían mucho tiempo pensando con la cabeza y no con el corazón y se impedían de dar el paso con confianza. La energía de esta Luna nos brinda esa entereza de sentirnos en un terreno firme, seguro, defendiendo a Cáncer de sus propios miedos con la convicción de ascender alto a la cima.

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Demos las Gracias a Cáncer por mostrarnos en este periodo el propósito de nuestra misión sanadora, gracias por contenernos en sus brazos con forma de tenazas de cangrejo, que no dañan ni pican si no que envuelven, gracias por mostrarnos esa inocencia que a veces necesitamos para fluir y no desesperarnos. Gracias por inundarnos con tu alegría y sonrisa infantil tan pura.

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Felicidades a todos los Cáncer que celebraron una vuelta más al sol.

Gracias por irradiar en sus entornos esa magia y esa luz, yo soy bendecida de tener en mi familia energía de Cáncer femenina de sol y masculina de ascendente, y debo decir que irradian esa esencia de luz, sonrisas puras y sin juicios, goce y disfrute.

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Ahora a recibir la energía Leonina con fuerza, ya Cáncer nos preparó el camino para tener contacto con nuestra luz interior, ahora con Leo vamos a fortalecer nuestro amor propio y autoestima.